El Nobel no es para latinoamericanos. Parte 1.
- Daniel Dominguez
- 29 abr 2024
- 10 Min. de lectura
Daniel Domínguez Gómez
October 6, 2020.
Original article in Spanish published on LinkedIn Pulse
¿Por qué no hay más ganadores latinxs del Premio Nobel?
El Nobel es el premio de mayor prestigio en el ámbito científico. Ganar este galardón suele ser el sueño de miles de jóvenes científicos, y el máximo objetivo de prestigiosos investigadores en todo el mundo; pero sólo un selecto grupo de científicos, escritores y personalidades lo ha conseguido a lo largo de sus más de 100 años de historia.

Cada año, durante las primeras semanas de Octubre, el Comité del Premio Nobel anuncia los nombres de los ganadores, elegidos por el impacto y relevancia de sus aportaciones en los ramos de Medicina o Fisiología, Física, Química, Literatura y Paz. Además, el Banco Central Sueco otorga el Premio de Economía en memoria de Alfred Nobel. Sin duda, esta es una de las semanas más esperadas del año para la comunidad científica, y uno de los pocos momentos en el año en que la ciencia ocupa un espacio en titulares de noticieros y periódicos en todo el mundo.
Esta semana conoceremos el nombre de los y las ganadoras en medio de la pandemia de COVID-19, un contexto único que servirá como marco para resaltar la importancia de la investigación científica y el desarrollo tecnológico, así como para visibilizar a las personas detrás de las investigaciones.
El año pasado (2019) nueve personas fueron galardonadas en las categorías de Medicina, Química y Física; todos hombres y originarios de países desarrollados (Reino Unido, Estados Unidos, Suiza y Japón). Tras leer un poco sobre las aportaciones que los hacen merecedores a tal distinción, y tras recordar un poco la tendencia de los últimos años surgieron varias preguntas en mi mente: ¿Por qué no hay mujeres en la lista?, ¿Por qué no hay investigadores de países en desarrollo? Y más específicamente ¿Por qué no hay Latinoamericanos entre los ganadores?
Me di a la tarea de revisar el listado de ganadores de los últimos veinte años en las categorías mencionadas y no observé una sola mujer u hombre procedente de América Latina. Fui más atrás en el listado hasta la primera generación en 1901, y observé que a lo largo de 118 años sólo seis galardonados son originarios de la región, cuatro en Medicina o Fisiología: Bernardo Houssay en 1948 (Argentina), Peter Medawar en 1960 (Brasil), Baruf Benacerraf en 1980 (Venezuela) y César Milstein en 1984 (Argentina), y dos en Química: Luis Federico Leloir en 1970 (Argentina) y Mario Molina en 1995 (México).

Figura 1. Ganadores Latinoamericanos del Premio Nobel. Nobel Prize Organization (2020)
Nunca un Latinoamericano ha recibido el Nobel de Física o Economía, y ninguna mujer Latinoamericana ha recibido esta distinción en áreas académicas, a diferencia de los Premios de la Paz o de Literatura donde algunas mujeres latinas han sido condecoradas.
En los últimos 30 años, sólo un latino ha ganado el Nobel.
De los seis ganadores, sólo dos recibieron el premio por investigaciones desarrolladas dentro de la región: Houssay por sus aportaciones al entendimiento del metabolismo de los carbohidratos en la hipófisis; y Leloir, discípulo de Houssay, por la identificación de azúcares-nucleótidos y su rol en el metabolismo de los carbohidratos. Ambos obtuvieron sus resultados mayoritariamente en laboratorios en Argentina.
Por otro lado, la mayor parte del trabajo de Milstein en anticuerpos monoclonales fue desarrollada en la Universidad de Cambridge (UK), el trabajo de Mario Molina sobre el efecto de los clorofluorocarbonos en la capa de ozono fue desarrollado en diversas universidades en Estados Unidos. Benacerraf descubrió los genes del Complejo Mayor de Histocompatibilidad mientras trabajaba en su laboratorio en Nueva York. Mientras que Medawar emigró a una corta edad a Reino Unido y su trabajo en inmunología fue realizado en la Universidad de Cambridge; renunciando incluso a la nacionalidad brasileña para evitar realizar el servicio militar obligatorio.
Con este contexto ahora mi pregunta era ¿Por qué sólo seis Latinoamericanos han ganado el Premio Nobel en la historia?
Al observar las desproporcionadas cifras en la lista histórica de ganadores del Premio Nobel, sería fácil pensar que se trata de un sesgo en el Comité de Selección, que favorece a científicos varones, blancos, que trabajan en instituciones prestigiosas en Norteamérica y Europa. No obstante, se trata de un problema más complejo y sistémico, que va más allá del sesgo en la elección.
Es un hecho que la ciencia es mucho más diversa que los Premios Nobel, que por momentos parecen un reflejo de la ciencia de inicios del siglo XX y no de la actualidad. Sin embargo, estos son un indicador del problema de inequidad y diversidad en el ramo de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (CTIM); así como del largo camino que debemos recorrer en Latinoamérica para fortalecer la cultura científica y posicionar a la ciencia y la tecnología como un área prioritaria para nuestros países.
¿El Nobel es cosa de hombres ? Un problema de equidad, diversidad e inclusión.
Los Comités de Selección del Nobel están integrados por un grupo de miembros de las Academias Suecas de Ciencia y Medicina, sumado a un grupo selecto de expertos de academias y universidades internacionales y a los ganadores anteriores del Premio Nobel, entre otros actores. En general, los Comités tienen una escasa diversidad étnica, geográfica y de género, lo que propicia en cierta medida que los nominados al Premio pertenezcan a círculos académicos pequeños y no contemplen el universo completo de investigaciones a lo largo del mundo. El ideal original de Alfred Nobel plasmado en su testamento indica que los ganadores deben ser elegidos por el mérito de sus aportaciones, sin importar su nacionalidad, origen racial o género. Lamentablemente las estadísticas no reflejan aquel ideal.
La inmensa mayoría de los galardonados en las 119 ediciones del Premio Nobel pueden ser catalogados como “hombres blancos”. Desde la primera edición en 1901 hasta 2019, sólo en 54 ocasiones el Premio Nobel se ha otorgado a una mujer, de un total de 950 ganadores (5.6% del total). Esta disparidad le ha valido severas críticas al Comité de Selección.
De las 53 mujeres galardonadas (Marie Curie recibió el Premio en 2 ocasiones), sólo 3 han sido en la categoría de Física, 4 en Química, 2 en economía y 12 en Medicina y Fisiología. Donna Strickland, ganadora del Nobel de Física en 2018 fue la primera mujer en ganar en esa categoría desde 1963, cuando Maria Goeppert-Mayer fue premiada.

Figura 2. Proporción de Ganadores del Premio Nobel por género, 1901-2019. Nobel Prize Organization (2020).
La inequidad de género es un problema que trasciende a los Premios Nobel, y es común observar una subrepresentación de mujeres en diversas áreas CTIM. Aunque en los últimos años la proporción de mujeres en estas áreas ha incrementado, el Instituto de Estadísticas de la UNESCO (UIS) estima que las mujeres representan sólo el 29.3% del total de personas empleadas en Investigación y Desarrollo a nivel mundial (UNESCO UIS, 2019).
Esta cifra es muy superior a lo observado en los Nobel, pues las mujeres premiadas en ciencias representan un 3% del total de ganadores.

Figura 3. Proporción de personas contratadas en actividades de I+D por género. UNESCO UIS (2019).
El Nobel es un premio de gran prestigio que usualmente está reservado para investigadores con una amplia carrera, consolidados en una posición de liderazgo en una universidad o centro de investigación de élite. Estas características reducen considerablemente el número de personas elegibles para recibir el premio. Durante los primeros 100 años de existencia de los Nobel, sólo 10 mujeres recibieron el premio (en 11 ocasiones), por lo que la mitad de las mujeres en la lista han sido premiadas en los últimos 20 años. Esto refleja una clara subrepresentación de mujeres en la lista de elegibles, y si bien muestra un cambio, aún no es suficiente.

Figura 4. Línea de tiempo de Mujeres Ganadoras del Premio Nobel en Mujeres CTIM.
Un estudio de Lunnemann, Jensen y Jauffred (2019) realizó un estudio estadístico para determinar si la subrepresentación de mujeres premiadas corresponde con el comportamiento histórico de la proporción femenina en posiciones senior en universidades de élite. El estudio encontró un sesgo de 96% en favor de los hombres en condiciones de ser elegibles con mujeres en las mismas condiciones.
Un factor predominante que explica la subrepresentación femenina en los premios Nobel es la disparidad en el número de mujeres que ocupan puestos de liderazgo en grupos de investigación en comparación con los hombres. Un estudio de la Agencia de los Estados Unidos para la Cooperación Internacional (USAID, 2015) determinó que las mujeres ocupan entre el 5 y el 20% de las posiciones de liderazgo en áreas CTIM. El estudio de Lunnemann concluye que hay diversos factores que hacen que sean menos las mujeres que llegan a la lista de elegibles, pues a lo largo de su carrera enfrentan diversos retos como la convención social de tener mayores obligaciones familiares, las mujeres galardonadas son menos propensas a estar casadas (63% vs 97%) y/o a tener hijos (55% vs 86%) que sus contrapartes masculinas. Adicionalmente, las mujeres tienen menores recursos para publicar, lo que se refleja en que las premiadas tienen un menor índice de publicación (219 vs 358). Esto, sumado a otras circunstancias como el acoso, discriminación, y el conocido techo de cristal, limitan las posibilidades de las mujeres de recibir el Premio.
Esta falta de equidad de género en los Premios Nobel es un problema evidente, que se extiende a todo el ámbito científico. Gracias a diversas iniciativas, cada vez hay una mayor difusión del impacto de las investigadoras científicas a lo largo del mundo. Un ejemplo de ello es el colectivo Científicas Mexicanas, que agrupa a más de 13,000 investigadoras para combatir la inequidad de género en el área científica en México; generando espacios para la colaboración y para compartir experiencias sobre los retos que enfrentan las mujeres que hacen ciencia en el país, además de visibilizar el trabajo de las investigadoras en la red. Otro gran ejemplo es Inspiring Girls, que genera y promueve espacios para inspirar a más niñas y jóvenes a perseguir carreras en áreas CTIM, con presencia en Chile y México. A pesar de los esfuerzos, aún falta un largo camino por recorrer para lograr una verdadera equidad de género.
En el caso de Latinoamérica, la proporción de mujeres en ciencia es de 45.1% del total de personas contratadas en Investigación y Desarrollo, una cifra mayor al 32.7% estimado para Norteamérica y Europa Occidental, al 39.3% de Europa Central y Oriental, y al 18.5% en el Sur y Occidente Asiáticos. A pesar de esta mayor representación de mujeres en actividades de I+D, ninguna de las 52 galardonadas en la historia es originaria de algún país de Latinoamérica, y es que a la notoria inequidad de género hay que sumarle otros problemas de diversidad.
El Nobel es cosa de hombres… blancos
En los últimos años la Fundación Nobel ha sido duramente criticada por la falta de diversidad en los premios. Lo cual se fundamenta en que, Asia, África y Latinoamérica han aportado sólo el 10.4% de los ganadores a pesar de representar al 84% de la población mundial, y una porción importante de la producción científica global.
En toda la historia sólo un científico negro ha recibido el galardón en áreas académicas: William Arthur Lewis de Santa Lucía quien ganó el Premio de Economía en 1979. Efectivamente, nunca un científico afrodescendiente ha ganado el Premio Nobel en las disciplinas de Medicina y Fisiología, Física o Química.

Figura 5. Proporción de ganadores del Premio Nobel por país. Nobel Prize Organization (2020).
Una cantidad desproporcionada de los ganadores son de origen Europeo y Norteamericano, con un 91.7% del total, y un 92.5% de los premiados en categorías CTIM. Estados Unidos lidera la lista de premiados por nacionalidad con 380, seguido por el Reino Unido con 132 y Alemania con 108. Sólo seis Latinoamericanos han ganado el Nobel: tres Argentinos, un Mexicano, un Brasileño y un Venezolano. Además, llama la atención el bajo número de galardonados provenientes de China, India y otras naciones asiáticas.

Figura 6. Proporción de ganadores del Premio Nobel por región. Nobel Prize Organization (2020).
Como se mencionó anteriormente, las personas elegibles para ser premiadas suelen estar afiliadas a instituciones de gran prestigio. Estados Unidos, Reino Unido y Alemania son países con una larga tradición en ciencia y tecnología, las Universidades de Oxford y Cambridge en Reino Unido tienen más de 900 años de existencia, una edad mayor a la de todos los países actuales de Latinoamérica. Adicionalmente, estos países tienen un gran número de instituciones de élite, 86 de las 100 universidades mejor evaluadas en el mundo en el ranking Times Higher Education se encuentran en Estados Unidos o Europa (THE, 2020).
Las universidades y centros de investigación en esta élite cuentan con mayores recursos e infraestructura en comparación con las instituciones en países en desarrollo, sin embargo, estos no son los únicos factores que causan esta subrepresentación. De manera similar al caso de la inequidad de género, los investigadores en países en desarrollo enfrentan diversos retos a lo largo de su carrera que limitan su entrada a la lista de elegibles, como la pobreza, discriminación, entre otros. Sin mencionar la escasa visibilidad de las investigaciones realizadas en países en desarrollo en comparación con las realizadas en Europa y Norteamérica.
Aún con estos factores en contra, cientos de investigadores Latinoamericanos han contribuido en grandes hallazgos, descubrimientos y desarrollos en ciencia y tecnología. Es común ver los nombres de investigadores latinos en publicaciones en revistas con alto índice de impacto, tanto de científicos que trabajan en prestigiosas universidades y centros de investigación en Norteamérica y Europa, como de investigadores que hacen grandes aportaciones desde las instituciones de la región. ¿Acaso no hay investigadores latinos con mérito suficiente para ganar un Premio Nobel?
No todo es culpa del Comité del Premio Nobel, debemos voltear a ver lo que estamos haciendo mal en nuestros países. En la siguiente parte de este análisis trataré de responder esta pregunta y abordaré la importancia de tener más Premios Nobel para el futuro de la región.
NOTA: En este artículo de ninguna manera se intenta demeritar a los y las investigadoras galardonadas con el Premio Nobel, pues sus aportaciones tienen un gran impacto para la ciencia y para la sociedad, y siempre deben ser consideradxs como Role Models para futuras generaciones. Esto es sólo un llamado a la diversidad e inclusión en el ámbito científico, y a fomentar una mayor cultura científica en Latinoamérica.
Puedes leer la segunda parte de esta entrada aquí: https://bit.ly/3dbJcRM
Referencias:
Lunnemann, P., Jensen, M.H. & Jauffred, L. (2019). Gender bias in Nobel prizes. Palgrave Commun 5, 46. <https://doi.org/10.1057/s41599-019-0256-3>
Mallapaty S. (2018). The Nobel gender gap is worse than you think. Nature Index Online. Consultado en Sitio Web, 01/10/2020. <https://www.natureindex.com/news-blog/the-nobel-gender-gap-is-worse-than-you-think>
Nichols G. (2018). Why Aren't There More Women Leaders in Science? Scientific American Voices (Blog). Consultado en Sitio Web, 01/10/2020. <https://blogs.scientificamerican.com/voices/why-arent-there-more-women-leaders-in-science/>
Nobel Prize facts. NobelPrize.org. Nobel Media AB 2020.Consultado en Sitio Web, 01/10/2020. <https://www.nobelprize.org/prizes/facts/nobel-prize-facts>
UNESCO Institute for Statistics (2019). Women in Science Fact Sheet No. 55. Consultado en sitio web 02/10/2020. <http://uis.unesco.org/sites/default/files/documents/fs55-women-in-science-2019-en.pdf>
USAID (2015). Gender Equality in Science, Technology, Engineering, Agricultural Sciences and Mathematics (STEAM) Academic Pipeline Challenges Transferring Knowledge to Practice. Consultado en Sitio Web 01/10/2020. <https://www.usaid.gov/sites/default/files/USAID-Report-Sep-30-2015-Final.pdf>
THE (2020). Times Higher Education Ranking. Consultado en Sitio Web, 01/10/2020. <https://www.timeshighereducation.com/world-university-rankings/2020/world-ranking#!/page/0/length/25/sort_by/rank/sort_order/asc/cols/stats>
Zimmer M. (2020). Nobel Prizes have a diversity problem even worse than the scientific fields they honor. The Conversation Blog. Consultado en Sitio Web, 29/09/2020. <https://theconversation.com/nobel-prizes-have-a-diversity-problem-even-worse-than-the-scientific-fields-they-honor-145799#:~:text=But%20in%20the%20119%20years,model%20scientists%20are%20white%20men.>
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